«Nuestra sangre está mezclada»
Fidalgo / 26 Marzo 2021

«Su visita a Irak, Santidad, significa que la Mesopotamia sigue siendo respetada y apreciada. Su visita significa un triunfo de la virtud, es un símbolo de estima para los iraquíes. Bendito sea el que erradica el miedo de las almas. Benditos sean los pacificadores. Su Santidad, ahora está plantando las semillas del amor y la felicidad» (Rafah Husein Baher; perteneciente a la comunidad religiosa sabea mandea). En un contexto geográfico, histórico, político y religioso, convulsionado, confuso, tensionado por violencias sistémicas, un papa, un seguidor de Jesucristo, en su ministerio de unidad, mediante la comunión diversificada y reconciliada, pone gestos y palabras, procura dejar emerger y hacer visibilizar rostros y voces que no ocultan el dolor, la tragedia y la sed de paz, la necesidad de otro mundo más digno y libre. Mientras otros hacen discursos a distancia o siguen estigmatizando pueblos y religiones, acusando de relativismo, eclecticismo, o se posicionan más desde la prudencia diplomática que desde la profecía del evangelio, papa Francisco se atreve, es evangélicamente atrevido, es bien-aventurado, va detrás de esos horizontes amplios desde donde la fe peregrina se abrió camino, Ur de los Caldeos, para recordar que todos los desvíos de la historia no solo no…

La cultura del cuidado, del cuidar, del cuidarnos…
Fidalgo / 26 Febbraio 2021

Este año el papa Francisco propuso como lema para la jornada mundial de la paz: La cultura del cuidado como camino de paz. Hace esta propuesta porque su lectura de la realidad a la luz del evangelio, le hace acentuar la necesidad epocal y kairótica de proponer la lógica del cuidado como paradigma fundamental de relación y de acción. En dicho mensaje, se proponen como fundamento, por un lado, el «Dios Creador, origen de la vocación humana al cuidado» y el «Dios Creador, modelo del cuidado», y por otro lado, «El cuidado en el ministerio de Jesús», y como consecuencia «la cultura del cuidado en la vida de los seguidores de Jesús». Desde aquí se proponen «los principios de la doctrina social de la Iglesia como fundamento de la cultura del cuidado». Por lo tanto, el papa no propone -como algunos al parecer sugieren-, un paradigma posmoderno[1], sino un paradigma profundamente arraigado en la revelación bíblica y en gran parte desarrollado en la tradición cristiana. Así las cosas, según Francisco, desde la «gramática del cuidado» se puede extraer «un rico patrimonio de principios, criterios e indicaciones», tales como: «el cuidado como promoción de la dignidad y de los derechos de…

Un año para profundizar Amoris Laetitia. Entre el coraje de la aplicación y la creatividad para ir más allá…
Fidalgo / 29 Gennaio 2021

El 19 de marzo de este año, cumpliéndose el 5º aniversario de la publicación de Amoris Laetitia, el papa Francisco inaugurará un año dedicado a lo que significa y suscita este documento, el cual concluirá el 26 de junio de 2022, durante el 10º Encuentro Mundial de las Familias en Roma (El amor familiar: vocación y camino de santidad). Para ello ya se ha creado un sitio web, que recomendamos visitar y tener muy presente: www.amorislaetitia.va. En el mismo se nos comunican los 5 objetivos de este año conmemorativo[1]. También se señalan algunas «Iniciativas y recursos», «12 propuestas y sugerencias para una pastoral familiar», y se promete «la difusión de herramientas de espiritualidad familiar, de formación y de acción pastoral sobre la preparación al matrimonio, la educación en la afectividad de los jóvenes, sobre la santidad e los esposos y de las familias que viven la gracia del sacramento en su vida cotidiana» y se anuncia además que «se organizarán simposios académicos internacionales para profundizar el contenido y las implicaciones de la exhortación apostólica en relación con temas de gran actualidad que atañen a las familias de todo el mundo». Esperemos que todo este programa ayude para dar mejores pasos…

Fraternidad/sororidad abierta y universal. Don y conquista…
Fidalgo / 31 Dicembre 2020

La propuesta de una «fraternidad universal» no es ciertamente nueva en nuestra historia, desde diversos ángulos se la ha buscado. Con mayores o menores aciertos. Ha habido diversos grupos que incluso buscando dicho ideal se han dividido entre ellos por tener diferentes modos de buscarla y de concretarla. Esto podría llevar a renunciar y a no seguir insistiendo, o por el contrario podría simplemente indicar la necesidad de seguir intentando encontrar nuevos y posibles caminos de realización. El papa Francisco, en continuidad con la mejor tradición cristiana y la impronta del Vaticano II, estaría por estos intentos. Su propuesta tiene sus peculiaridades, acentúa que dicha fraternidad/sororidad además de ser universal, debe ser abierta, sin fronteras, inclusiva, respetuosa de las diversidades y, fundamentalmente, respetuosa de la común e inalienable dignidad humana. Frente a esta propuesta encontraremos sin dudas normales reacciones que incluyen rechazos, escepticismos y acogidas muy variadas. La pregunta es si el tiempo histórico está lo suficientemente maduro como para no quedarnos allí, en las primeras y comprensibles variopintas reacciones, y poder ir más allá realizando pasos concretos de encuentro y abriendo procesos de diálogo mediante los cuales se pudiera ir abandonando trincheras y abriéndose a nuevas configuraciones identitarias, personales…

El valor y el sentido del perdón según Fratelli tutti
Fidalgo / 17 Dicembre 2020

  El papa Francisco parte de la dura constatación que nos pesa un mundo cuyas mayores sombras son la cerrazón, la fragmentación, el individualismo y las heridas deshumanizantes que nuestros estilos y sistemas de vida producen. Desde este contexto se anima a reproponer el sueño y el camino humano y cristiano fundamental: el de una «fraternidad/sororidad abierta y universal», que sea capaz de animar y sostener una «amistad social», por medio de la cual se puedan a su vez animar y sostener procesos de transformación paradigmática, con el solo fin de lograr una vida más digna y libre, en paz, en armonía entre los seres humanos, los pueblos y el ecosistema. Con estas perspectivas propone la recuperación y el lanzamiento de una praxis de «la mejor política», animada por «el amor político» y el ejercicio de un poder local e internacional que mire más por las personas que por los meros beneficios y oportunismos. Propone la generación de una nueva «cultura del encuentro», donde «el diálogo y la amistad social» vengan a ser la motivación y el soporte fundamental para poder lograr «verdaderos consensos» en la búsqueda de la verdad y de las mejores estrategias en orden a ir más…